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El CERMI regional propone medidas de mejora
La EMT Valencia discrimina a las personas con discapacidad

El CERMI Comunidad Valenciana ha remitido un informe sobre la accesibilidad de los autobuses y entorno de la Empresa Municipal de Transportes de Valencia (EMT Valencia), donde se recoge un análisis del actual funcionamiento del servicio y lanza una serie de propuestas de mejora relativas al diseño de paradas, los vehículos, el personal, el Servicio de Atención al Cliente y el Bono Oro.
En lo que se refiere al personal, el documento plantea la necesidad de que la EMT incluya un ambicioso Plan de Formación, con cursos que faciliten el trato con personas con cualquier tipo de discapacidad, marcando siempre una discriminación positiva hacia este colectivo, ya que, según este documento, “el trato deja mucho que desear”. A ello cabría añadir la creación de un decálogo sobre cómo tratar a las personas con discapacidad.
Por otro lado, también se lanzan una serie de mejoras referentes a los vehículos, que pasarían por ofrecer mayor estabilidad y seguridad a las personas con discapacidad a través de un aumento de las sujeciones y otros elementos en las rampas, cuyo funcionamiento, según señala el texto, debería asegurarse en todas las ocasiones.
Este apartado incluye, además, la necesidad de utilizar el arrodillamiento de vehículo para la entrada de las personas con movilidad reducida y recomienda una colocación accesible de las canceladotas en el interior.
En el punto referente a las mejoras en las paradas, el informe indica que en su diseño debe primar la seguridad y el adecuado acceso a la información, entre otras cuestiones.
Finalmente, el texto recoge dos últimas reivindicaciones: que se establezcan mecanismos que hagan efectivas las quejas de los usuarios y que se extienda el Bono Oro por un lado a las personas con una discapacidad reconocida del 65% que trabajan y por otro a las personas con este mismo grado de discapacidad que dependen de terceras personas y no tengan derecho a pensión, puesto que su exclusión supone un agravio comparativo.
Además de al departamento de Atención al Cliente de la EMT, el CERMI CV ha remitido este documento a la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU), al consejo Valenciano de Acción Social, la revista CONSUMER, a la Consellería de Infraestructuras y Transporte, al concejal delegado de Circulación y Transporte e Infraestructuras del Transporte y a la Asociación CVDIA.
Otro caso de discriminación
El informe que ha entregado el CERMI CV a la EMT Valencia tiene lugar en un contexto en el que la entidad que agrupa al 98% de los valencianos con discapacidad recibe continuas quejas sobre su servicio. Un ejemplo más es el de un usuario del transporte público con movilidad reducida que días atrás interpuso una reclamación contra el conductor de un autobús de la línea 9 en Valencia por trato discriminatorio por razón de discapacidad.
Tal como señala el usuario en su escrito, el autobús estaba lleno: “Todos los asientos iban ocupados y muchas personas también viajaban de pie, de modo que me resultaba imposible pasar mi bono oro por la máquina canceladora”. En esta situación el conductor le recriminó “de muy malos modos” el hecho de no haber podido cancelar el billete.
Según el testimonio de este usuario: “Entablamos una acalorada discusión, y, al terminar el viaje, el conductor desplegó la rampa, pero no bajó las suspensiones, de modo que la inclinación de la rampa era peligrosa”. Ante la petición del usuario de bajar la suspensión, la respuesta del conductor fue que el mecanismo no funcionaba y no podía inclinarlo. De este modo, el usuario tuvo que se ayudado por otros viajeros para poder salir del autobús.
El Comité de Representantes de Personas con Discapacidad de la Comunidad Valenciana (CERMI CV) es la máxima plataforma de representación, defensa y acción social de las diferentes discapacidades, en total en la Comunidad Valenciana representa a más del 95% de las más de 400.000 personas con discapacidad.
En lo que se refiere al personal, el documento plantea la necesidad de que la EMT incluya un ambicioso Plan de Formación, con cursos que faciliten el trato con personas con cualquier tipo de discapacidad, marcando siempre una discriminación positiva hacia este colectivo, ya que, según este documento, “el trato deja mucho que desear”. A ello cabría añadir la creación de un decálogo sobre cómo tratar a las personas con discapacidad.
Por otro lado, también se lanzan una serie de mejoras referentes a los vehículos, que pasarían por ofrecer mayor estabilidad y seguridad a las personas con discapacidad a través de un aumento de las sujeciones y otros elementos en las rampas, cuyo funcionamiento, según señala el texto, debería asegurarse en todas las ocasiones.
Este apartado incluye, además, la necesidad de utilizar el arrodillamiento de vehículo para la entrada de las personas con movilidad reducida y recomienda una colocación accesible de las canceladotas en el interior.
En el punto referente a las mejoras en las paradas, el informe indica que en su diseño debe primar la seguridad y el adecuado acceso a la información, entre otras cuestiones.
Finalmente, el texto recoge dos últimas reivindicaciones: que se establezcan mecanismos que hagan efectivas las quejas de los usuarios y que se extienda el Bono Oro por un lado a las personas con una discapacidad reconocida del 65% que trabajan y por otro a las personas con este mismo grado de discapacidad que dependen de terceras personas y no tengan derecho a pensión, puesto que su exclusión supone un agravio comparativo.
Además de al departamento de Atención al Cliente de la EMT, el CERMI CV ha remitido este documento a la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU), al consejo Valenciano de Acción Social, la revista CONSUMER, a la Consellería de Infraestructuras y Transporte, al concejal delegado de Circulación y Transporte e Infraestructuras del Transporte y a la Asociación CVDIA.
Otro caso de discriminación
El informe que ha entregado el CERMI CV a la EMT Valencia tiene lugar en un contexto en el que la entidad que agrupa al 98% de los valencianos con discapacidad recibe continuas quejas sobre su servicio. Un ejemplo más es el de un usuario del transporte público con movilidad reducida que días atrás interpuso una reclamación contra el conductor de un autobús de la línea 9 en Valencia por trato discriminatorio por razón de discapacidad.
Tal como señala el usuario en su escrito, el autobús estaba lleno: “Todos los asientos iban ocupados y muchas personas también viajaban de pie, de modo que me resultaba imposible pasar mi bono oro por la máquina canceladora”. En esta situación el conductor le recriminó “de muy malos modos” el hecho de no haber podido cancelar el billete.
Según el testimonio de este usuario: “Entablamos una acalorada discusión, y, al terminar el viaje, el conductor desplegó la rampa, pero no bajó las suspensiones, de modo que la inclinación de la rampa era peligrosa”. Ante la petición del usuario de bajar la suspensión, la respuesta del conductor fue que el mecanismo no funcionaba y no podía inclinarlo. De este modo, el usuario tuvo que se ayudado por otros viajeros para poder salir del autobús.
El Comité de Representantes de Personas con Discapacidad de la Comunidad Valenciana (CERMI CV) es la máxima plataforma de representación, defensa y acción social de las diferentes discapacidades, en total en la Comunidad Valenciana representa a más del 95% de las más de 400.000 personas con discapacidad.


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