Su discapacidad no es una barrera para ejercer la política
Federico Pozuelo, concejal electo del PP al Ayuntamiento de Albacete

Ocupaba el puesto número 16 en la candidatura del PP al Ayuntamiento de Albacete. Federico Pozuelo cierra la lista de los 16 concejales electos el pasado 22 de mayo y ejercerá por primera vez, a sus 35 años, una responsabilidad en un equipo de gobierno municipal. La silla de ruedas, una vez más, no es un impedimento. Entrevista publicada en el diario "La Verdad".
-En su caso bien podría decirse que de casta le viene al galgo ya que su vinculación política no es nueva e incluso su padre ostentó un cargo con el PP.
-Lo he vivido desde muy pequeño. Desde siempre me ha interesado la política. Decía mi madre que cuando yo era muy pequeño una de las formas de tenerme entretenido era ponerme el Telediario. La sintonía del Telediario me hacía tranquilizarme. Tengo además antecedentes familiares importantes de vinculación en política.
Mis abuelos, tanto mi abuelo paterno como mi bisabuelo materno fueron alcaldes en su época. Y mis padres también han tenido cierta vinculación política, primero con Alianza Popular y ahora con el Partido Popular. Es ya casi una tradición familiar que yo he vivido desde siempre y que he heredado en cierta medida.
-Es la primera vez que accede a ser concejal, pero no es la primera que forma parte de la candidatura del PP.
-En 2003 ya formé parte de la lista que encabezaba en aquel momento Rosario Casado y en 2007, ya con Carmen Bayod como candidata, tuve el honor de que contaran conmigo para acompañarlas en la aventura política.
-¿Entraba en sus cábalas sinceramente salir elegido?
-Se había hecho un buen trabajo a nivel de grupo municipal y había expectativas con lo que consideramos un proyecto interesante y un equipo de trabajo preparado. Pensábamos que podía haber un cambio político porque se pulsaba en la ciudad y nunca se sabe... Había encuestas al principio de la campaña que decían que podíamos llegar a los 16 concejales, aunque nunca se sabe lo que puede pasar. Lo que decide al final es el recuento de las urnas.
-¿En ningún momento en la noche electoral le sorprendió entrar en el próximo equipo de gobierno?, ¿Qué se llegase a ese concejal número 16?
-Empezaron a salir los resultados y al principio ya nos daban 16. Luego empezaron a bailar un poco los resultados y oscilaba entre 15 y 16 concejales. La verdad es que me puse contento, fue una alegría y también algo de sorpresa, aunque había expectativas de que podía ocurrir.
-Sus familiares ya han estado en el mundo de la política, ¿qué consejos le dan?
-He recibido muchos consejos. Me dicen ante todo que sea muy prudente y que sea correcto y respetuoso, porque las formas son también muy importantes. Pero sobre todo me aconsejan prudencia, me dicen que no se pueden tomar decisiones a la ligera, que siempre hay que meditarlas. Y que no tenga miedo.
-¿Y tiene miedo a pasar a tener una responsabilidad de gobierno?
-La noche electoral si que es cierto que impone un poco, porque la carga de responsabilidad es grande. Después ya lo asimilas y tiras para adelante, con humildad y con ganas de trabajar sobre todo.
-¿Cómo ha vivido esta campaña electoral?, ¿Ha sido dura o la esperaba más difícil?
-Ha sido una campaña como todas, de mucha actividad y de mucho contacto con la ciudad, con los ciudadanos. La verdad es que la he vivido con mucho trabajo pero también con mucha ilusión. Es una época que agota físicamente, pero también te recarga las energías. Ves el apoyo de la gente y también, ¿por qué no?, las críticas. Es una etapa siempre muy interesante.
-¿Qué le gustaría poder aportar a este equipo?
-La responsabilidad que cada uno tengamos se decidirá en su momento, pero básicamente me gustaría poder aportar capacidad de trabajo e ilusión básicamente.
Dificultades
-¿Es consciente de que acceden a gobernar la ciudad de Albacete en un momento muy complicado?
-Es una responsabilidad, pero es una responsabilidad que asumimos plenamente conscientes de la situación que existe. Y lo hacemos con humildad y con ganas de trabajar. Agradecemos el apoyo que nos han dado y esperamos estar a la altura de la confianza que han depositado muchos albaceteños en nosotros.
-Es presidente de la Asociación de Espina Bífida en Albacete y conoce bien los problemas del colectivo de discapacitados.
-Soy todavía presidente de la Asociación de Espina Bífida de Albacete y, por tanto, también estoy muy vinculado con Cocemfe-Fama. Desde ese punto de vista conozco muy bien la realidad de la discapacidad y trabajaremos por mejorarla, evidentemente, en la medida de las posibilidades.
-¿Cuáles son las principales necesidades que tienen las personas con una discapacidad física en la capital albaceteña?
-En ese sentido la eliminación de barreras arquitectónicas es muy importante y también trabajar más en la autonomía de las personas con discapacidad. Esto es algo que es muy necesario. Creo que son los dos puntos básicos en los que hay que trabajar en materia de discapacidad: en promoción de la salud y de la autonomía personal y en la eliminación de barreras arquitectónicas.
-Tiene 35 años, ¿qué problemas tiene el colectivo de jóvenes?, ¿qué le preocupa a los de su entorno?
-La principal inquietud es el empleo, la falta de oportunidades laborales porque eso es lo que hace que un joven pueda desarrollar su proyecto vital. Sabemos que hay muchos jóvenes que tiene ese problema.
-¿Conoce el movimiento 15M y las razones de la movilización?, ¿Ha tenido ocasión de hablar con gente que participe en el mismo, sean o no jóvenes?
-No he tenido mucho trato personal con ellos. Conozco la generalidad, lo que se conoce públicamente. Pero creo que siempre es bueno que la sociedad se mueva y que se implique en las soluciones a los problemas que tiene.
-¿Cree que existen motivos para que la gente esté tan indignada en estos momentos?
-Es evidente que los jóvenes ahora mismo una serie de necesidades que reclaman.
-Una de los compromisos del PP es la prohibición del botellón, ¿cómo cree que responderán los jóvenes ante esta medida?, ¿Será complejo que la acepten?
-Será una medida que habrá que tomar con su tiempo y con su prudencia, pero que se puede explicar que tiene sus razones de ser y que se comprenderá por la ciudadanía sin duda alguna.