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Sue Austin decidió que la discapacidad que sufre no iba a poder con ella
Sirena en silla de ruedas

De todas las inmersiones que he realizado a lo largo de este verano y de los diferentes amigos con los que he compartido briefing, trayectos de embarcación y maravillosos fondos, quiero dedicarle este post a una estupenda buceadora y amiga, que en cada salida de buceo nos daba a todos una lección de superación, una dosis de optimismo y una tremenda vitalidad, a pesar de contar con una sola pierna y una prótesis.
Como mi compañera de viajes por los fondos marinos, la psicóloga y artista Sue Austin decidió que la discapacidad que sufre no iba a poder con ella. Y apostó por el arte con sillas de ruedas. Tras plasmar su inspiración en pinturas y otras acciones artísticas, se especializó en unas exhibiciones bajo el agua que ha bautizado como Freewheeling.
Las sensaciones que llega a transmitir al público cuando ejecuta su danza ayudada por una silla modificada con alas y propulsores de Pegasus la llevaron incluso a los últimos Juegos Paralímpicos de Londres 2012. Austin, como bien se aprecia en el vídeo, también se adentra en el mar en busca de la libertad.
Y es que como mi amiga nos repetía una y otra vez este verano: "El buceo es una de las pocas experiencias que otorgan al buceador discapacitado, la sensación de no tener las barreras físicas que nos ponemos nosotros cada día".
Gracias a ella, he ido descubriendo tanto la gran labor de los instructores de buceo adaptado como la de asociaciones como la IAHD, cuya finalidad es hacerles llegar la magia del buceo a personas discapacitadas a través de materiales, cursos o técnicas, entre otros servicios.
Cierto es que la mar no discrimina a nadie y nos deja a cada uno de nosotros disfrutar de él de una manera única y diferente, transmitiéndonos sensaciones y experiencias únicas.
A lo largo y ancho del país contamos con estupendos centros donde instructores cualificados, enseñan, certifican y comparten la ilusión del submarinismo con aquellas personas que con una u otra limitación física requieren de un curso especial y de unos materiales adaptados a sus necesidades.
De lo mucho y bueno me gustaría destacar la labor de toda la gente de Balkysub y de Rivermar. Primero, por su calidad en la formación y, por otro lado, por el entorno privilegiado en el que se encuentran.
Y Sue Austin ha sabido plasmar con precisión la belleza del buceo adaptado.
Es realmente mágico. Felices inmersiones.
(Por ÁLEX PORRAS)
Como mi compañera de viajes por los fondos marinos, la psicóloga y artista Sue Austin decidió que la discapacidad que sufre no iba a poder con ella. Y apostó por el arte con sillas de ruedas. Tras plasmar su inspiración en pinturas y otras acciones artísticas, se especializó en unas exhibiciones bajo el agua que ha bautizado como Freewheeling.
Las sensaciones que llega a transmitir al público cuando ejecuta su danza ayudada por una silla modificada con alas y propulsores de Pegasus la llevaron incluso a los últimos Juegos Paralímpicos de Londres 2012. Austin, como bien se aprecia en el vídeo, también se adentra en el mar en busca de la libertad.
Y es que como mi amiga nos repetía una y otra vez este verano: "El buceo es una de las pocas experiencias que otorgan al buceador discapacitado, la sensación de no tener las barreras físicas que nos ponemos nosotros cada día".
Gracias a ella, he ido descubriendo tanto la gran labor de los instructores de buceo adaptado como la de asociaciones como la IAHD, cuya finalidad es hacerles llegar la magia del buceo a personas discapacitadas a través de materiales, cursos o técnicas, entre otros servicios.
Cierto es que la mar no discrimina a nadie y nos deja a cada uno de nosotros disfrutar de él de una manera única y diferente, transmitiéndonos sensaciones y experiencias únicas.
A lo largo y ancho del país contamos con estupendos centros donde instructores cualificados, enseñan, certifican y comparten la ilusión del submarinismo con aquellas personas que con una u otra limitación física requieren de un curso especial y de unos materiales adaptados a sus necesidades.
De lo mucho y bueno me gustaría destacar la labor de toda la gente de Balkysub y de Rivermar. Primero, por su calidad en la formación y, por otro lado, por el entorno privilegiado en el que se encuentran.
Y Sue Austin ha sabido plasmar con precisión la belleza del buceo adaptado.
Es realmente mágico. Felices inmersiones.
(Por ÁLEX PORRAS)